¿Son necesarios los exámenes físicos anuales en adolescentes?
Antecedentes: Las recomendaciones sobre la frecuencia de los exámenes físicos de rutina para los adolescentes han variado desde un examen cada 2 o 3 años hasta evaluaciones anuales. Dado que ninguna de estas recomendaciones se basaba en estudios sobre la utilidad de dichos exámenes, era pertinente revisar los resultados de los estudios publicados.
Métodos: Se revisaron todas las series de exámenes escolares y preatléticos rutinarios de adolescentes publicados en la literatura inglesa desde 1943 hasta 1995. Sólo se incluyeron revisiones de exámenes realizados por médicos con o sin profesionales sanitarios supervisados.
Resultados: Los hallazgos incluyeron el peso, la presión arterial, la agudeza visual, los soplos cardíacos inocentes, la escoliosis, la remisión para pruebas adicionales y las anomalías graves desconocidas antes del examen. Se resumió un total de 20.047 exámenes realizados por 12 grupos diferentes de investigadores. Sólo 2 adolescentes presentaban hallazgos importantes y desconocidos hasta entonces: Un niño era ciego de un ojo y el otro tenía insuficiencia mitral. Entre el 0,1% y el 1,6% de los adolescentes presentaban presiones sanguíneas elevadas. Los hallazgos menores incluyeron acné, caries, miopía y problemas ortopédicos menores, pero no impidieron la participación en la escuela o los deportes.
Conclusiones: Los exámenes físicos anuales en adolescentes no son rentables y no tienen prácticamente ningún valor para encontrar condiciones patológicas importantes. Esta conclusión no sería aplicable a los adolescentes sexualmente activos. El valor de un examen para la educación sanitaria o la detección de problemas mentales nunca se ha probado en esta población. Para el ingreso en la escuela y en los campamentos o para la participación en deportes, la revisión de un cuestionario y los exámenes de cribado por parte de los proveedores de salud aliados deberían ser el método de elección, a menos que futuros estudios justifiquen la repetición de los exámenes anuales de los adolescentes.