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Aunque técnicamente es una fruta, el tomate entra en la categoría de «verdura», según el Tribunal Supremo.

El alto tribunal emitió esta sentencia sobre el tomate en 1893 en un caso presentado por los miembros de la familia Nix contra Edward Hedden, recaudador del puerto de Nueva York, para recuperar las tasas que gastaron en el transporte de tomates.

Los Nix demandaron en virtud de la Tarifa de 1883, que exigía impuestos sobre las verduras importadas, pero no sobre las frutas.

Botánicamente, cualquier estructura portadora de semillas formada a partir del ovario de una angiosperma (una planta con flores) es una fruta. Dado que un tomate protege y contiene las semillas de su planta huésped, la jugosa esfera es técnicamente una fruta. A algunos les sorprendería saber que un calabacín también es una fruta.

Sin embargo, las clasificaciones generales o culinarias suelen diferir de la botánica. La mayoría de la gente consideraría que un tomate es una verdura. Y el tribunal dio esencialmente ese razonamiento en Nix v. Hedden: Un tomate es una verdura porque la gente piensa que lo es.

Los argumentos fueron cortos y sencillos. El abogado del acusado leyó definiciones del Diccionario Webster de «guisante», «berenjena», «pepino», «calabaza» y «pimiento» como prueba.

El demandante hizo entonces lo mismo (añadiendo el Diccionario Worcester) con las definiciones de «patata», «nabo», «chirivía», «coliflor», «col», «zanahoria» y «judía». Técnicamente, un frijol es una legumbre, pero también entra en la categoría de verdura en el habla cotidiana.

El tribunal decidió por unanimidad que la clasificación científica de un tomate no cambia el lenguaje común. Por lo tanto, la Ley de Aranceles pretendía gravar los tomates. Y la familia Nix no recuperaría su dinero. La opinión del tribunal decía:

Botánicamente hablando, los tomates son el fruto de una vid, al igual que los pepinos, calabazas, judías y guisantes. Pero en el lenguaje común de la gente, ya sean vendedores o consumidores de provisiones, todas ellas son verduras que se cultivan en los huertos y que, tanto si se comen cocidas como crudas, son, como las patatas, las zanahorias, las chirivías, los nabos, las remolachas, la coliflor, el repollo, el apio y la lechuga, generalmente servidas en la cena en, con o después de la sopa, el pescado o las carnes que constituyen la parte principal del banquete, y no, como las frutas generalmente, como postre.

El gobierno de Estados Unidos abandonó el Arancel de 1833 por el Arancel Negro de 1842, al que posteriormente sustituyó el Arancel Walker. Pero el fallo del tribunal sobre la clasificación de los tomates sigue en pie y continúa afectando a los procedimientos legales. Otros casos del Tribunal Supremo, como Saltonstall v. Wiebusch &Hilger y Cadwalader v. Zeh, han citado Nix v. Hedden, normalmente en relación con el pago de impuestos atrasados.