Cómo detectar cuando el gato tiene dolor | Reston Now
Este es un post patrocinado por la veterinaria Elizabeth Arguelles, propietaria de Just Cats Clinic en Lake Anne Plaza. Ella escribe semanalmente en Reston Now.
Los gatos experimentan dolor como todos los demás animales, pero las señales de que les duele son mucho más difíciles de detectar. Puede ser frustrante y descorazonador, como propietario de un gato, descubrir de repente que su amigo peludo ya no quiere subir las escaleras se debe en realidad a una dolorosa artritis. Pero si aprende algunos de los signos más sutiles del dolor en los felinos, podrá notar los síntomas antes y ayudar a su gato aún más.
En realidad hay una respuesta evolutiva a por qué los gatos ocultan tan bien su dolor. Como animales solitarios, los gatos tratan de ocultar sus heridas. En la naturaleza, los gatos que muestran signos evidentes de dolor tienen más probabilidades de convertirse en la presa de otro depredador, por lo que la especie ha desarrollado un enfoque estoico ante el dolor como una ventaja evolutiva.
Para asegurarse de que no pasamos por alto estos signos sutiles de dolor, es crucial notar incluso los cambios menores en la rutina o el comportamiento de su gato. Por ejemplo, un gato puede negarse repentinamente a saltar a sus lugares favoritos, como el alféizar de la ventana, o, del mismo modo, algunos gatos se quedan repentinamente en la planta baja y no suben las escaleras. Puede deberse al dolor o a la incomodidad. Además, la Asociación Americana de Hospitales de Animales recomienda la evaluación del dolor en cada examen físico, ya sea para el bienestar anual o para una visita por enfermedad, para asegurarse de que su peludo miembro de la familia no tiene ninguna molestia.
La siguiente es una lista de indicadores potenciales de que su gato puede tener dolor. Tenga en cuenta que esta lista no es exhaustiva y que estos síntomas pueden indicar otros problemas. Cada gato es un poco diferente, y el suyo puede tener su propia manera de hacerle saber que algo está mal. Póngase siempre en contacto con su veterinario si cree que su gato siente dolor.
- Cambios en el comportamiento. Si su gato es generalmente ruidoso, puede volverse silencioso de repente. Del mismo modo, si su gato no es generalmente hablador, podría volverse vocal. Los gatos normalmente dóciles y amistosos pueden volverse más agresivos, siseando o arañando cuando se les acerca o se les manipula.
- Sueño excesivo
- Se ensucia fuera de la caja de arena. Esto podría ser una indicación de que su gato tiene dolor al entrar y salir de la caja de arena.
- Falta de apetito. Los gatos que están sufriendo suelen dejar de comer.
- Esconderse. Si su gato desaparece repentinamente durante largos periodos de tiempo o lo encuentra escondido en lugares en los que normalmente no pasa mucho tiempo, podría ser un indicio de que algo va mal.
- Disminución del acicalamiento O aumento del mismo. Esté atento a la aparición de nuevas calvas, especialmente en el estómago.
- Sentarse encorvado con la espalda arqueada, las patas recogidas bajo el cuerpo, la nariz apoyada en el suelo y los ojos cerrados. Esto se conoce como la posición del «pastel de carne».
- Ronronear cuando no reciben ningún estímulo positivo. Los gatos no sólo ronronean cuando están contentos. También lo hacen cuando están asustados, y algunos ronronean para reconfortarse cuando les duele.
- Mirada lejana o distante en los ojos del gato
- Resistencia a la manipulación o a ser cogido
- Rigidez o cojera
- Cualquier cambio inusual o extraño en el comportamiento
Recuerde, usted es el que mejor conoce a su gato, así que si cree que algo va mal o parece estar mal, póngase en contacto con su veterinario para pedir una cita. Antes de la cita, asegúrese de observar cuidadosamente el comportamiento de su gato para poder describir los síntomas con precisión. Un registro o diario en el que se registre la frecuencia de los comportamientos preocupantes es muy útil para que su veterinario pueda ayudar a identificar el problema con mayor rapidez y precisar cuándo comenzó.
Para obtener más información, visite nuestra Biblioteca de Salud Felina o el sitio web de la American Animal Hospital Association.