HistoriaEditar

En el primer capítulo de ‘Mi gurú y su discípulo’ de Christopher Isherwood, escrito en 1940, el escritor relata las conversaciones con Gerald Heard sobre los valores espirituales de éste. Heard respondió a las preguntas de Isherwood y explicó además que él, Heard, seguía lo que Heard llamaba «vida intencional». (Isherwood puso la frase entre comillas.)Heard dijo que una de las partes más difíciles de la disciplina era ser consciente de las propias pretensiones. Puedes librarte de todas las adicciones y aversiones mundanas… la pretensión más mortal puede levantar la cabeza. Puedes empezar a creer que eres una persona espiritualmente superior …’

PasosEditar

Vivir intencionalmente requiere que uno sea consciente de sus creencias fundamentales y que esté dispuesto a hacer un esfuerzo para que su comportamiento refleje estas creencias en una forma de integridad en relación con su conciencia y su entorno. En algunos casos, estos cambios son lo suficientemente drásticos como para que individuos con ideas afines se agrupen en comunidades intencionales.

Según el escritor Joshua Becker, los pasos pueden resumirse como:

• Realizar que la vida está hecha de elecciones. Las actitudes y las decisiones no tienen que estar determinadas por nuestro pasado, sino que pueden elegirse.
• Estamos rodeados de una cultura. Podemos determinar su dirección y ver si queremos lo mismo o no.
• Saber quiénes somos y qué queremos (hacer, comunicar y aportar). Dedicar tiempo a nuestras pasiones.

ObjetivosEditar

Algunos ejemplos de vida intencional son el cohousing, la vida ética, la vida frugal, la comunidad moral, la vida sencilla, la vida sostenible, así como muchos estilos de vida religiosos. Las comunidades intencionales, como el Camino Simple, las comunidades Bruderhof, la Comunidad de San Anselmo son comunidades intencionales basadas en valores y creencias cristianas.

Aunque no representan necesariamente estilos de vida distintos o reales, existen muchos temas y áreas de interés, actividad y estudio humanos que contribuyen a la vida intencional. Algunos ejemplos son la tecnología apropiada, la conservación, la ecología, el ecologismo, el humanismo, el humanitarismo y la inversión socialmente responsable.