Q1. Mi marido tiene tres pólipos en la vejiga. ¿Son peligrosos, aunque no sean cancerosos? Si se los extirpa, ¿qué implica la cirugía?

– Linda, Kansas

La mayoría de los pólipos en la vejiga son en realidad cánceres de vejiga. La mayoría de los cánceres de vejiga son lesiones no invasivas que sobresalen en el hueco de la vejiga en tallos, como una coliflor. Los tumores de vejiga se identifican mediante una cistoscopia, en la que se pasa un endoscopio por la uretra hasta la vejiga para permitir la inspección visual del interior de la vejiga. Esta operación suele realizarse en la consulta del urólogo. El tratamiento consiste en la «resección transuretral», es decir, el médico raspa los tumores con un instrumento de cauterización para su examen patológico. El procedimiento suele ser una cirugía ambulatoria, con una posible hospitalización limitada para obtener tejido para el diagnóstico e intentar un tratamiento posterior. En muchos casos, la resección de los tumores será el principal tratamiento quirúrgico de un tumor de vejiga. Los tratamientos adicionales pueden implicar la instalación de agentes de quimioterapia o inmunoterapia en la vejiga.

Un subconjunto más pequeño de cánceres de vejiga consiste en tumores que son invasivos. Aunque pueden tener la apariencia de pólipos, invaden el músculo profundo de la pared de la vejiga. En estos casos, si las biopsias confirman la naturaleza invasiva de los tumores, puede ser necesaria la extirpación quirúrgica de la vejiga. Los cánceres de vejiga no invasivos, si no se extirpan, pueden progresar hasta convertirse en invasivos.

Existen tratamientos excelentes para todos los estadios del cáncer de vejiga, por lo que la evaluación y el tratamiento oportunos son importantes.

Q2. Mi médico me está haciendo pruebas de dolor en el costado. ¿Qué es el dolor de costado, qué lo causa y qué le llevaría a buscarlo?

– Lonny, Florida

El dolor de costado se produce en la región de los riñones en la parte media o baja de la espalda, y normalmente se siente en una zona que se extiende desde las costillas inferiores en la parte media de la espalda, por debajo del omóplato, hasta la parte delantera del abdomen. El dolor de costado suele ser el resultado de una anomalía renal, como un cálculo, una obstrucción, un tumor o una infección. Los primeros pasos para evaluar el dolor de costado son una exploración física y un análisis de orina. Después pueden ser necesarias otras pruebas. Sólo en raras ocasiones, el examen físico detecta signos de una masa renal, por ejemplo. Si el análisis de orina muestra sangre en la orina, esto sería una indicación de que se necesitan más estudios radiográficos para evaluar los riñones.

Aprenda más en el Centro de Cáncer de Vejiga de Everyday Health.