Tratamiento

Sep 9, 2021
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¿Se trata de un trastorno bipolar o de una depresión?

El trastorno bipolar suele diagnosticarse erróneamente. Una de las causas es que muchos individuos con trastorno bipolar buscan tratamiento cuando están en el estado más depresivo. Cuando están en la fase maníaca, no se dan cuenta de que el problema se está presentando. La mayoría de los individuos con trastorno bipolar sufren los síntomas un mayor porcentaje del tiempo que cuando están maníacos o hipomaníacos.

Ser diagnosticado erróneamente con depresión es un problema grave porque el tratamiento para la depresión bipolar es muy diferente al de la depresión normal. Los antidepresivos a veces pueden empeorar el trastorno bipolar. Por lo tanto, lo mejor para el individuo es acudir a un especialista en trastornos del estado de ánimo que pueda ayudar a determinar lo que está ocurriendo.

Según la Guía de Ayuda, estos son los indicadores de que su depresión es realmente un trastorno bipolar:

  • Ha experimentado repetidos episodios de depresión mayor.
  • Ha tenido su primer episodio de depresión mayor antes de los 25 años.
  • Tiene un pariente de primer grado con trastorno bipolar.
  • Cuando no está deprimido, su estado de ánimo y sus niveles de energía son más altos que los de la mayoría de las personas.
  • Cuando está deprimido, duerme demasiado y come en exceso.
  • Sus episodios de depresión mayor son breves (menos de 3 meses)
  • Ha perdido el contacto con la realidad mientras estaba deprimido.
  • Ha tenido depresión posparto anteriormente.
  • Ha desarrollado manía o hipomanía mientras tomaba un antidepresivo.
  • Su antidepresivo dejó de funcionar después de varios meses.
  • Ha probado 3 o más antidepresivos sin éxito.

Explorando las opciones de tratamiento del trastorno bipolar

Si su terapeuta considera que tiene el diagnóstico de trastorno bipolar, debe proporcionarle opciones de tratamiento y posiblemente prescribirle medicación como parte de su plan de tratamiento. Su terapeuta también puede remitirle a otro profesional de la salud mental, como un psicólogo, psiquiatra, consejero o un especialista en trastorno bipolar. Como equipo, debe trabajar con sus proveedores de atención médica para desarrollar un plan de tratamiento que funcione para usted.

Tratamiento integral para el trastorno bipolar

Un plan de tratamiento integral para el trastorno bipolar tiene como objetivo aliviar los síntomas, restaurar su capacidad de funcionamiento, solucionar los problemas que la enfermedad ha causado en el hogar y en el trabajo, y reducir la probabilidad de recurrencia. Un plan de tratamiento completo incluye:

Medicación – La medicación es la piedra angular del tratamiento del trastorno bipolar. Tomar una medicación estabilizadora del estado de ánimo puede ayudar a minimizar los altibajos del trastorno bipolar y a mantener los síntomas bajo control.

Psicoterapia – La terapia es esencial para tratar el trastorno bipolar y los problemas que ha causado en su vida. Trabajando con un terapeuta, puede aprender a hacer frente a los sentimientos difíciles o incómodos, a reparar sus relaciones, a manejar el estrés y a regular su estado de ánimo.

Educación – El control de los síntomas y la prevención de complicaciones comienzan con un conocimiento profundo de su enfermedad. La educación es un componente clave del tratamiento. Cuanto más sepan usted y sus seres queridos sobre el trastorno bipolar, mejor podrán evitar los problemas y afrontar los contratiempos.

Manejo del estilo de vida – Si regula cuidadosamente su estilo de vida, puede mantener los síntomas y los episodios de estado de ánimo al mínimo. Esto implica mantener un horario de sueño regular, evitar el alcohol y las drogas, seguir un programa de ejercicio consistente, minimizar el estrés y mantener una exposición a la luz solar estable durante todo el año.

Apoyo – Vivir con el trastorno bipolar puede ser un reto, y contar con un sistema de apoyo sólido puede marcar la diferencia en su perspectiva y motivación. Participar en un grupo de apoyo al trastorno bipolar le da la oportunidad de compartir sus experiencias y aprender de otras personas que saben por lo que está pasando. El apoyo de amigos y familiares también es inestimable.

Tratamiento farmacológico del trastorno bipolar

La mayoría de las personas con trastorno bipolar necesitan medicación para mantener sus síntomas bajo control. Cuando la medicación es continuada a largo plazo, puede reducir la frecuencia y la gravedad de los episodios del estado de ánimo bipolar y, a veces, prevenirlos por completo. Si le han diagnosticado un trastorno bipolar, usted y su médico trabajarán juntos para encontrar el fármaco o la combinación de fármacos adecuados para sus necesidades. Dado que cada persona responde a la medicación de forma diferente, es posible que tenga que probar varios medicamentos diferentes antes de encontrar uno que alivie sus síntomas.

Consulte frecuentemente a su médico. Es importante que se haga análisis de sangre con regularidad para asegurarse de que los niveles de la medicación están dentro del rango terapéutico. Conseguir la dosis adecuada es un delicado acto de equilibrio. Una estrecha vigilancia por parte de su médico le ayudará a mantenerse seguro y sin síntomas.

Continúe tomando su medicación, incluso si su estado de ánimo es estable. No deje de tomar la medicación en cuanto empiece a sentirse mejor. La mayoría de las personas necesitan tomar la medicación a largo plazo para evitar recaídas.

No espere que la medicación solucione todos sus problemas. La medicación para el trastorno bipolar puede ayudar a reducir los síntomas de la manía y la depresión, pero para sentirse mejor, es importante llevar un estilo de vida que apoye el bienestar. Esto incluye rodearse de personas que le apoyen, hacer terapia y descansar mucho.

Tenga mucha precaución con los antidepresivos. Las investigaciones demuestran que los antidepresivos no son especialmente eficaces en el tratamiento de la depresión bipolar. Además, pueden desencadenar la manía o provocar ciclos rápidos entre la depresión y la manía en personas con trastorno bipolar.

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