Refrescantemente refinados: 20 cuartos infantiles en amarillo y gris
Si hay una combinación de colores que ofrece la mezcla perfecta de energía vivaz y elegancia contemporánea, es el amarillo y el gris. Ya sea en elegantes comedores o en hermosos dormitorios, se trata de un dúo de colores que combina el resplandor intemporal del amarillo con la presencia de moda del gris. Ofreciendo un compromiso entre la alegría brillante y la sofisticación moderna, esta combinación de colores funciona increíblemente bien también en el cuarto de los niños. Lo mejor de todo es que puedes crear fácilmente un espacio de género neutro con el amarillo y el gris, que luego puede convertirse en una habitación infantil para niño o niña con la adición de un tercer tono.
La tendencia de recurrir al gris y utilizarlo en sustitución del blanco lleva ya unos cuantos años, y los propietarios de viviendas han acogido este cambio con alegría. Los toques de amarillo colocados de forma inteligente pueden convertir este entorno gris aparentemente monótono en una habitación vibrante y atractiva; algo que es absolutamente necesario para el cuarto de los niños. Desde las delicias bañadas por el sol hasta las que abrazan plenamente el encanto del amarillo, aquí tienes un resumen de los 20 mejores diseños de habitaciones infantiles en amarillo y gris –
Un acogedor, Amarillo
Al igual que las muchas tonalidades de gris que pueden variar entre lo atrevido y lo discreto, el amarillo también cuenta con una amplia gama de matices que pueden utilizarse fácilmente para crear el telón de fondo de una habitación infantil cálida y acogedora. Quienes deseen utilizar el amarillo como tono dominante en el cuarto infantil deben considerar cuidadosamente la iluminación de la habitación, su tamaño y el estilo que desean lograr antes de comprometerse con él. Demasiado amarillo puede parecer llamativo, pero tonos como el amarillo claro, el Crayola, el crema y el amarillo suave son perfectos para una habitación infantil moderna con un fondo reconfortante y radiante. Utilice el gris en estas habitaciones para anclar el espacio y proporcionar un equilibrio visual.
Cortinas y alfombras
¿No te interesa usar mucho el amarillo en la habitación infantil? Eso no es un problema, ya que hay muchas otras formas de llevar el amarillo a la habitación de tu pequeño. Aquí es donde se recurre al gris y se utiliza como color principal de la habitación, mientras que el amarillo desempeña un llamativo papel secundario en forma de fabulosas alfombras y enérgicas cortinas. Las cortinas son, sin duda, la forma más fácil de añadir el amarillo a la habitación infantil gris sin que moleste demasiado, y siempre puedes optar por nuevas cortinas en cuanto tu pequeño (o quizá seas tú) se aburra del amarillo.
Un toque de resplandor
No descartes el encanto y el encanto del amarillo, aunque sólo haga una aparición en el cuarto de los niños. De hecho, con el gris y sus múltiples matices dando forma a las paredes, el suelo y el techo, los acentos amarillos parecen aún más prominentes e impresionantes. Una encantadora lámpara de mesa con una pantalla dorada, una cajita en el cambiador revestida de amarillo brillante, un delicioso puf marroquí en amarillo mango brillante o incluso un cojín y una manta en este tono resplandeciente; la más mínima infusión de amarillo captará al instante la atención de tu pequeño. No obstante, recuerda que cuanto más neutra sea la habitación, mayor será el impacto visual de estos elegantes complementos.
Una celebración del patrón
¡Una habitación infantil en amarillo y gris no es, sin duda, sólo color y clase! Hay mucho margen para añadir motivos atractivos y patrones de moda aquí, y se puede empezar de forma sencilla con una pared de acento a rayas o una alfombra con un patrón chevron. El papel pintado con motivos geométricos y los vinilos decorativos personalizados, que van de lo extravagante a lo exquisito, llevan este encantador motivo a un nivel completamente nuevo. También es mejor añadir capas adicionales de color que vayan bien con el gris y el amarillo, ya que las investigaciones sugieren que las guarderías sobrecargadas de tonos neutros y apagados pueden tener un efecto negativo en los niños.
Cuando se trata de encontrar el equilibrio adecuado entre emoción y descanso, el amarillo y el gris triunfan. Esta es probablemente la razón más importante por la que deberías probarlos en la habitación del bebé