¿Pueden aparecer hematomas con la acupuntura?
P: Hace poco me hicieron acupuntura y una de las agujas me dolió mucho al entrar y ese punto sangraba, ahora tengo un hematoma bastante grande (negro/azul oscuro) que todavía me duele mucho 24 horas después del tratamiento. ¿Es esto normal? ¿Debería sangrar al recibir acupuntura? El acupunturista dijo que era porque había tocado una vena y se encogió de hombros. Pero ahora me preocupa volver para otra sesión.
A: Lamentamos oír que su experiencia con el tratamiento de acupuntura no ha sido del todo feliz. Aunque la acupuntura es un tratamiento notablemente seguro, hay un pequeño número de acontecimientos adversos que pueden ocurrir con el tratamiento, y los hematomas son uno de ellos. Aunque las agujas son extremadamente finas, en ocasiones pueden golpear pequeños vasos sanguíneos, y aunque el profesional suele darse cuenta de ello en cuanto se retira la aguja y aplica presión con un algodón estéril para detener la hemorragia y reducir los posibles moratones, la zona puede seguir presentando moratones importantes en las horas siguientes. Los hematomas pueden tardar hasta una semana o más en desaparecer, dependiendo de la edad y la salud de la persona. No llegaríamos a decir que es «normal», pero ocurre ocasionalmente y nuestros miembros son conscientes de que es algo ante lo que deben reaccionar adecuadamente.
No creemos que deba preocuparse en absoluto por volver a realizar otra sesión. Es importante que le comunique a su profesional lo que ha sucedido por varias razones. A veces es significativo desde el punto de vista del diagnóstico si alguien se magulla con facilidad, y también hay ajustes que los profesionales pueden hacer en su técnica que pueden reducir la posibilidad de que se produzcan más magulladuras (utilizando agujas aún más finas y una acción más suave de las agujas, por ejemplo). También parece que la actitud de tu médico no te ha tranquilizado del todo, y puede valer la pena que le hagas esta observación. Nosotros somos acupuntores y estamos muy acostumbrados a lo que hacemos y a los efectos que puede tener; un paciente no lo está. Puede ser bastante fácil olvidar lo aprensiva que puede ser la gente a la hora de someterse a un tratamiento que sólo recientemente se ha convertido en una parte más de la práctica sanitaria general.
Esperamos que sus tratamientos posteriores no tengan incidencias, salvo que se sienta mejor.