Versión imprimible en PDF de Prevención y tratamiento de las picaduras de garrapatas (PDF 231 KB)

¿Qué son las garrapatas?

Las garrapatas son parásitos que se alimentan de la sangre de los animales y del hombre. Hay más de 800 especies de garrapatas en todo el mundo, 70 de las cuales se encuentran en Australia, y se ha informado de que 16 especies se alimentan de seres humanos.

Hay dos grupos principales de garrapatas: garrapatas duras y garrapatas blandas.

Las garrapatas duras (familia: Ixodidae) tienen un cuerpo plano y duro y un aparato bucal alargado con filas de dientes que apuntan hacia atrás. Este grupo incluye las especies más importantes que pican a los humanos.

Las garrapatas blandas (familia: Argasidae) tienen un aspecto coriáceo arrugado. Sólo se encuentran unas pocas especies de este tipo en Australia y rara vez entran en contacto con las personas.

La garrapata más importante en Australia es la garrapata de la parálisis, Ixodes holocyclus, y más del 95% de las picaduras de garrapata en el este de Australia se deben a esta especie. La mayoría de las enfermedades transmitidas por garrapatas se deben a esta especie.

La garrapata de la parálisis

La garrapata de la parálisis, Ixodes holocyclus, se encuentra a lo largo de la costa oriental de Australia al este de la Gran Cordillera Divisoria, y posiblemente en Tasmania. Se la conoce comúnmente como garrapata de la hierba, garrapata de la semilla y garrapata del arbusto, dependiendo de su fase de desarrollo. No se conoce su presencia en Australia Meridional, Australia Occidental o el Territorio del Norte.

Aunque I. holocyclus es la más común, hay otras dos especies de Ixodes en Australia que causan parálisis: I. hirsti, que se da en el sur de Australia y también se ha documentado en Nueva Gales del Sur y Tasmania, e I. cornuatus, que se da en Tasmania y Victoria.

El ciclo vital de la garrapata consta de cuatro fases: el huevo, la larva (de aproximadamente 1 mm y de color marrón claro cuando no está llena de sangre), la ninfa (de aproximadamente 2 mm y de color marrón pálido) y los adultos (de 4-5 mm de longitud, sin sangre). La garrapata de la parálisis necesita alimentarse de sangre para desarrollarse a lo largo de su ciclo vital, desde la fase de larva hasta la de ninfa y la de adulto. La hembra adulta se alimenta de sangre para obtener proteínas para la puesta de huevos.

Cuando está completamente engullida es de color gris-azulado y mide alrededor de 1cm de longitud.

Ciclo de vida de la garrapata (S.L. Doggett, Departamento de Entomología Médica, Hospital de Westmead) como se ha descrito anteriormente.

La garrapata de la parálisis es más común en zonas costeras húmedas con abundantes animales autóctonos que sirven de huéspedes para la garrapata. Los pastos largos y los matorrales proporcionan entornos ideales para las garrapatas, y si usted vive cerca de estas zonas, no es raro que tenga garrapatas de la parálisis en su jardín. Esta garrapata tiene una marcada estacionalidad; la fase larvaria es más activa durante los meses de otoño, la ninfa durante el invierno y el adulto durante la primavera. Esta garrapata es más activa durante los períodos de alta humedad, especialmente después de la lluvia, y es cuando debe tener especial cuidado para evitar las picaduras de garrapatas.

Las garrapatas de la parálisis no son particularmente móviles, y dependen de los animales que pasan para alimentarse de sangre. La garrapata de la parálisis se arrastra por los tallos de las hierbas o por las ramas y se «posa» lista para engancharse a un animal que pase, incluidos los humanos. En su hábitat, rara vez suben más de 50 cm, por lo que no se dejan caer de los árboles, a pesar de esta creencia común. Sin embargo, después de posarse sobre una persona o un animal, pueden subir por el cuerpo y adherirse a la zona de la cabeza.

Hembra de Ixodes holocyclus (S.L. Doggett, Departamento de Entomología Médica, Hospital de Westmead) fotografía superior

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¿Cómo afecta la garrapata de la parálisis a los humanos?

La garrapata se adhiere perforando sus afiladas piezas bucales en la piel. A continuación, inyecta una saliva anticoagulante (sustancia que impide que la sangre se coagule) que le permite alimentarse sin que la sangre se coagule. En el caso de la garrapata de la parálisis, la saliva puede ser muy tóxica para algunos animales y, potencialmente, para los seres humanos.

La mayoría de las picaduras de garrapata no plantean problemas médicos, aparte de cierta hinchazón y enrojecimiento localizados en el lugar de la picadura si la garrapata se retira rápidamente. Sin embargo, en algunos casos, las personas pueden sufrir afecciones más graves, como parálisis por garrapatas o reacciones alérgicas, incluido el choque anafiláctico. Los primeros síntomas de la parálisis por garrapatas pueden incluir erupciones cutáneas, dolor de cabeza, fiebre, síntomas parecidos a los de la gripe, sensibilidad de los ganglios linfáticos, marcha inestable, intolerancia a la luz brillante, mayor debilidad de las extremidades y parálisis facial parcial. La parálisis por garrapatas, aunque es poco frecuente, suele observarse en niños más que en adultos. Las reacciones alérgicas pueden dar lugar a una inflamación de la garganta, y pueden provocar dificultades respiratorias o colapso. Es importante buscar rápidamente atención médica si se presentan estos síntomas. Si ha tenido síntomas similares en el pasado tras ser picado por una garrapata, es una buena idea estar siempre preparado.

En Australia también se dan algunas enfermedades graves transmitidas por garrapatas, como el tifus por garrapatas de Queensland y la fiebre manchada de la isla Flinders. Existe la preocupación de que otras enfermedades graves, como un síndrome similar al de la enfermedad de Lyme, puedan ser causadas por la exposición a las garrapatas australianas, aunque todavía no hay pruebas de que esto sea así (enfermedad de Lyme).

Recientemente se ha descrito un nuevo síndrome conocido como «alergia a la carne de mamíferos inducida por garrapatas», por el que las personas picadas por la garrapata de la parálisis, que se encuentra en la costa oriental de Australia, pueden desarrollar posteriormente una reacción anafiláctica al consumir carnes y subproductos animales como la gelatina. Este síndrome también se ha descrito en el extranjero.

¿Cómo prevenir las picaduras de garrapatas?

La mejor manera de prevenir las picaduras de garrapatas es evitar las zonas infestadas por ellas.

Si esto no es posible, use ropa adecuada como:

• una camisa de manga larga
• pantalones largos metidos dentro de los calcetines
• ropa de color claro para que sea más fácil ver las garrapatas en la ropa antes de que se adhieran a la piel

Antes de entrar en posibles entornos infectados por garrapatas aplique sobre la piel un repelente de insectos que contenga dietil-meta-toluamida (DEET) o picaridina. El repelente debe aplicarse y reaplicarse según las instrucciones del fabricante. También se recomienda el uso de ropa tratada con permetrina.

Los kits de lavado con permetrina para tratar la ropa pueden obtenerse en las tiendas de ocio al aire libre y es importante seguir las instrucciones de la etiqueta. La ropa tratada con permetrina se considera el medio más eficaz para prevenir la picadura de garrapatas en zonas infestadas de garrapatas.

Toda la ropa debe quitarse después de visitar zonas infestadas de garrapatas y colocarse en una secadora caliente durante 20 minutos para matar cualquier garrapata que pudiera estar todavía en la ropa. A continuación, se debe revisar todo el cuerpo en busca de garrapatas de todos los tamaños y estadios, prestando especial atención a las zonas situadas detrás de las orejas y la parte posterior de la cabeza o el cuello, sobre todo en los niños.

Quitar las garrapatas

Si sufre reacciones alérgicas a las garrapatas, sólo intente quitar una garrapata mientras se encuentre en un centro médico, como un servicio de urgencias.

En personas no alérgicas o en el caso de garrapatas en fase larvaria o ninfal:

• Al retirar una garrapata con pinzas de punta fina (no con pinzas domésticas, a menos que no se disponga de pinzas de punta fina), agarre la garrapata lo más cerca posible de la superficie de la piel. Tire hacia arriba con una presión constante y evite sacudir o retorcer la garrapata.
• Antes de retirarla, se puede rociar la garrapata con un repelente de insectos en aerosol que contenga piretrina o un producto químico piretroide, aunque actualmente no hay pruebas que sugieran que esto sea beneficioso. También pueden utilizarse cremas a base de permetrina, disponibles en farmacias. Aplíquelas al menos dos veces con un intervalo de un minuto entre las aplicaciones.
• Si tiene dificultad para quitar la garrapata o sufre algún síntoma después de quitarla, busque atención médica urgentemente.

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Consejos

• Utilice sólo pinzas de punta fina y evite apretar el cuerpo de la garrapata.
• No utilice remedios folclóricos como cerillas o alfileres porque irritarán la garrapata y dificultarán su extracción completa.
• Evite rascarse y no utilice productos químicos irritantes como el alcohol metílico o el queroseno.

Nota

La Sociedad Australiana de Inmunología Clínica y Alergia ha recomendado recientemente matar una garrapata adulta en el lugar utilizando un spray que contenga éter para matar la garrapata congelándola. Estos productos se utilizan normalmente para el tratamiento de las verrugas y las marcas en la piel y se pueden adquirir fácilmente en las farmacias.

Este documento no recomienda este método hasta que se disponga de investigaciones basadas en la evidencia. Cuando se publiquen nuevas pruebas se revisará este documento.

Más información

Si le preocupan las garrapatas, póngase en contacto con:

• su médico
• el Centro de Información sobre Venenos: 13 11 26
• su departamento de salud estatal o territorial
• su responsable de salud ambiental del ayuntamiento
• Sociedad Australasiana de Inmunología Clínica y Alergia (www.allergy.org.au).