(Un post invitado de Trylyon Love, un estudiante de la escuela pública de Oakland y convertidor de energía)

La escuela es un lugar en el que se supone que nos estamos «educando». Si la escuela es un lugar tan beneficioso para nosotros, ¿por qué hay tantos estudiantes que suspenden la mayoría de sus clases? ¿Por qué los estudiantes se quejan cada día de venir aquí?

Nuestros profesores nos están enseñando material innecesario que no necesitamos (y más que probablemente no necesitaremos) en el día a día o en nuestra vida adulta. ¿Necesito saber raíces cuadradas cuando voy a hacer la compra? No todo el mundo quiere aprender a codificar. Los profesores dicen que quieren que la escuela sea divertida y que quieren que vayamos a la escuela con ganas de aprender, pero con las cosas que nos enseñan, ¡realmente no estamos aprendiendo nada! Los estudiantes no van a estar ansiosos por venir a la escuela, van a estar ansiosos por irse. Creo que los profesores deberían enseñarnos habilidades para la vida.

Por qué tantos estudiantes faltan a clase:

Nos aburrimos simplemente sentados en clase siendo obligados a trabajar en una tarea que nos parece bastante irrelevante. En mi escuela, creo que todos los estudiantes son inteligentes, pero simplemente eligen no hacer el trabajo o faltar a clase porque no entienden lo que se enseña en sus clases. Mucho de lo que aprendemos está tan desconectado de nuestras vidas. La información diluida de esta clase de historia no tendrá ninguna relación con mi vida si vivo en la pobreza y no tengo las habilidades adecuadas para salir de ella.

Otra razón por la que algunos estudiantes faltan a clase es que no reciben el apoyo adicional del profesor que necesitan. Algunos de nosotros nos retrasamos y luego simplemente nos rendimos porque no vemos la manera de salir del agujero. Nunca me han enseñado a estudiar. No me refiero a memorizar un libro de texto, sino a estudiar de verdad.

La última razón por la que creo que tantos estudiantes se saltan las clases es la arrogancia que muestran algunos de nuestros profesores. Siempre existe esa actitud de que porque ellos han sido jóvenes antes no tenemos nada que aportar.

Aunque aprecio y necesito la sabiduría de mis profesores, la mayoría de los que he tratado están completamente fuera de contacto con mi generación. Es diferente ser un adolescente de lo que era hace 10 o 30 años. Vivimos en una nueva era digital en la que yo nací y muchos de mis profesores han tenido que aprender. Los profesores deben estar bien haciéndonos preguntas y permitiéndonos ayudar a informar sobre qué y cómo nos enseñan. Sin embargo, si sé que me van a ignorar o descartar, además de que la información no tiene sentido para mí y no voy a participar, ¿por qué querría estar en esa clase? ¿Querrías presentarte a un trabajo en el que te sintieras así TODOS LOS DÍAS?

Sin embargo, tengo algunas ideas que quiero que los educadores conozcan. Hay muchas cosas que me preocupan y que necesitaré saber como adulto. Éstas son algunas de las que me preocupan constantemente:

Habilidades de la vida que me gustaría aprender:

Me gustaría saber cómo hacer los impuestos. No tengo ni idea de eso. También conozco a muchos adultos que tienen que gastar grandes cantidades yendo a lugares como H&R Block.

Me encantaría saber cómo estudiar. ¡Necesito técnicas de estudio! ¿Cómo puedo tomar lo que usted presenta e ir más allá de las páginas del libro de texto? Si puedes ayudarme a encontrar un significado más profundo a través de mi lectura y el tiempo de clase, creo que podría ser realmente beneficioso para mí como adulto.

También me gustaría aprender a tratar mejor con la policía y otras figuras de autoridad superior. No sólo con la policía, sino que quiero aprender cómo funciona el poder en Estados Unidos. Otra habilidad que me preocupa es qué hacer cuando estamos en una situación problemática que involucra a personas de mayor autoridad. La gente es abatida por la policía. En mi barrio, en algún momento, tendré que lidiar con la policía. Ni siquiera es cuestión de si estoy haciendo algo malo. Simplemente son una presencia tan grande, y estos son los tiempos en los que estamos viviendo.