Como paciente con cáncer, es posible que haya recibido mucha información sobre su tratamiento y su camino hacia la recuperación. La quimioterapia y la radiación provocan muchos cambios en el cuerpo a medida que destruyen las células cancerosas. Uno de los principales cambios es que estos tratamientos debilitan su sistema inmunitario, lo que puede aumentar sus posibilidades de contraer una infección, incluida una infección fúngica.

Los pacientes con trasplante de células madre o los que padecen un cáncer de la sangre (hematológico), como leucemia, linfoma o mieloma, pueden tener diferentes riesgos de contraer infecciones fúngicas. Por favor, consulte Pacientes con trasplante de células madre e infecciones fúngicas para obtener más información.

Lo que necesita saber sobre las infecciones fúngicas

La quimioterapia y la radiación reducen su recuento de glóbulos blancos. Mientras recibe su tratamiento contra el cáncer, su recuento de glóbulos blancos puede llegar a ser muy bajo, también conocido como icono pdf de neutropenia. Durante este tiempo, su organismo tendrá problemas para combatir las infecciones, incluidas las fúngicas. 1

Las infecciones fúngicas pueden ser desde leves hasta potencialmente mortales. Algunas infecciones fúngicas son erupciones cutáneas leves, pero otras pueden ser mortales, como la neumonía fúngica. Por ello, es importante buscar tratamiento lo antes posible para intentar evitar una infección grave.

Las infecciones por hongos pueden parecerse a las infecciones bacterianas o víricas. Si está tomando medicamentos para combatir una infección y no mejora, pida a su médico que le haga pruebas para detectar una infección fúngica.

El tipo de cáncer que padece puede afectar a su riesgo. Si tiene un cáncer de la sangre como la leucemia o el mieloma, puede tener un mayor riesgo de contraer una infección por hongos que las personas con otros tipos de cáncer. 2, 3

Su riesgo de infección puede cambiar en función de la intensidad de su quimioterapia. Algunos tipos de cáncer pueden requerir una medicación de quimioterapia más fuerte que otros, especialmente los cánceres de la sangre. Esto se conoce a veces como quimioterapia agresiva. La quimioterapia agresiva debilita su sistema inmunitario y puede ponerle en riesgo de contraer una infección por hongos. 4

Su estancia en el hospital es importante. Después de su trasplante, es posible que deba permanecer en el hospital durante mucho tiempo. Mientras esté allí, es posible que tenga que someterse a procedimientos que pueden aumentar su probabilidad de contraer una infección por hongos. Consulte los tipos de infecciones asociadas a la atención sanitaria para obtener más información.

El lugar donde vive (geografía) importa. Algunos hongos causantes de enfermedades son más comunes en ciertas partes del mundo. Si usted vive o visita estas zonas y tiene cáncer, puede ser más propenso a contraer estas infecciones que la población general. 5 Para obtener más información sobre las enfermedades relacionadas con los viajes, consulte el sitio de salud del viajero de los CDC.

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Prevención de las infecciones fúngicas en pacientes con cáncer

Los hongos son difíciles de evitar porque forman parte natural del medio ambiente. Los hongos viven al aire libre en el suelo, en las plantas, los árboles y otra vegetación. También están en muchas superficies interiores y en su piel. Sin embargo, puede haber algunas formas de reducir las posibilidades de contraer una infección, incluida una infección fúngica grave.

Aprenda sobre las infecciones fúngicas. Existen diferentes tipos de infecciones por hongos. Aprender sobre ellas puede ayudarle a usted y a su proveedor de atención médica a reconocer los síntomas a tiempo, lo que puede prevenir una enfermedad grave.

Saber si su recuento de glóbulos blancos es bajo. Tener un recuento de glóbulos blancos muy bajo (icono neutropenia pdf) puede suponer un mayor riesgo de infección. 6

Obtenga atención médica adicional si es necesario. Las infecciones por hongos suelen parecerse a otras enfermedades. Visitar a su proveedor de atención médica puede ayudar a un diagnóstico más rápido y puede prevenir una enfermedad grave.

Medicación antifúngica. Su proveedor de atención médica puede recetarle medicamentos para prevenir las infecciones por hongos. Los científicos todavía están aprendiendo sobre qué pacientes tienen mayor riesgo y cómo prevenir mejor las infecciones fúngicas. 6, 7

Protéjase del entorno. A medida que se recupera de la quimioterapia y empieza a realizar de nuevo sus actividades normales, puede haber algunas formas de reducir las posibilidades de contraer una infección fúngica grave tratando de evitar los hongos causantes de enfermedades en el entorno. 8 Es importante tener en cuenta que, aunque se recomiendan estas acciones, no se ha demostrado que prevengan las infecciones fúngicas.

• Trate de evitar las zonas con mucho polvo, como los lugares de construcción o excavación.
• Manténgase en el interior durante las tormentas de polvo.
• Aléjese de las zonas con excrementos de aves y murciélagos. Esto incluye lugares como gallineros y cuevas.
• Lleve guantes cuando manipule materiales como tierra, musgo o estiércol.
• Lleve zapatos, pantalones largos y camisa de manga larga cuando realice actividades al aire libre como jardinería, trabajos de jardinería o visite zonas boscosas.

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