Actualización: El republicano Ron DeSantis gana las elecciones del martes y se convierte en el próximo gobernador de Florida

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Pocas personas conocen mejor a los candidatos a gobernador de Florida que sus esposas. Tanto Casey DeSantis como R. Jai Gillum son fuerzas a tener en cuenta por sí mismas. Son fuertes, educadas y resistentes.

Casey DeSantis ha sido llamada el arma secreta del candidato republicano Ron DeSantis. La galardonada periodista y otrora campeona de equitación podría convertirse en la próxima Primera Dama de Florida.

Durante la temporada política, todos esperamos que las cosas se calienten. Los anuncios se vuelven desagradables y algunos toman un giro aparentemente extraño. Casey y sus hijos fueron los protagonistas de un anuncio que acaparó la atención y las críticas.

Mason, de 6 meses, y Madison, de casi 2, aparecieron en cámara leyendo un libro de «Make America Great Again» y, con bloques de juguete en la mano, se pudo ver a Madison construyendo un muro, sugiriendo apoyar la agenda del presidente Trump.

«Hay que mirarlo con perspectiva», dijo Casey. «Hubo millones de dólares en anuncios de ataque negativos contra Ron, intereses especiales. Ahí era donde estábamos y dijimos bueno ¿cómo respondemos? Respondimos con humor. Nos divertimos y creo que a mucha gente le gustó y entendió el chiste».

No es ajena a los focos. Durante años, su acogedora sonrisa adornó las ondas locales de Jacksonville. Casey presentó programas en el PGA TOUR y en First Coast Living.

Su entrada en los informativos de televisión fue un desvío para la graduada del College of Charleston, que se licenció en economía y se especializó en francés.

Crecida en Troy, Ohio, fueron las noticias de televisión las que llevaron a Casey a Jacksonville, Florida, y una partida de golf la que la puso en el punto de mira de Ron DeSantis.

«Nos conocimos en la Universidad del Norte de Florida, en el campo de prácticas de Kernan», dijo Casey. «No dejaba de mirar por encima del hombro porque quería el cubo de bolas que alguien había dejado porque mi swing era terrible. Necesitaba toda la práctica posible. Mientras miraba por detrás de mí, Ron estaba allí. Cree que le estoy mirando a él. En realidad estaba mirando las bolas. Resumiendo, empezamos a hablar y así nos conocimos.»

Se ilumina hablando de su hombre de la Marina y recuerda el día que temió perderlo. El 14 de junio de 2017 hubo un tiroteo en Washington en un partido de béisbol del Congreso al que asistió Ron.

«Estaba aquí en la emisora esa mañana cuando miro hacia arriba y veo nuestras noticias cubriendo un tiroteo en el béisbol del Congreso y supe que mi marido estaba allí», dijo. «No creo que puedas poner palabras a lo que eso hace. Quiero decir que es tu marido, es tu familia y piensas que algo así puede ocurrir. No hay palabras para describirlo, fue uno de los días más difíciles de mi vida».

Ella ha tenido muchos momentos de orgullo a su lado apoyando sus sueños y dice que él, a su vez, ha hecho lo mismo.

«Siempre ha sido un tipo que me ha empujado en la dirección correcta para tener éxito y creo que eso es muy especial», dijo.

Cuando está en casa dice que su marido es un padre práctico. Lava los platos, cambia los pañales y le permite disfrutar de su tiempo lejos de las aparentemente interminables obligaciones de la maternidad.

«Hace un buen trabajo», dijo. «Estoy muy agradecida por el trabajo que hace cuando tiene la oportunidad de estar en casa».

La vida en la campaña ha sido agitada con dos niños a cuestas, pero Casey dice que está aprendiendo de primera mano sobre los problemas que afectan a los floridanos, como la crisis de las algas tóxicas.

«Cuando escucho historias de madres que dicen que no quieren que sus hijos se bañen en el agua porque tienen miedo de lo que les pueda pasar o, peor aún, mi hijo se metió en el agua y terminé en la sala de emergencias al día siguiente, para mí eso no está bien, eso no es Florida», dijo. «Tenemos que arreglar este problema y sé que Ron está muy comprometido en arreglarlo y yo también».

Cuando se le pregunta sobre la conversación entre ella y su marido cuando decidió presentarse a gobernador de Florida, dice que fue rápida. Ella cree en él, sabe que está en esto por las razones correctas y estuvo inmediatamente dispuesta a apoyar su decisión de presentarse.

El viernes por la noche a las 11, conocerás a R. Jai Gillum. Habla sobre los problemas de infertilidad, la vida en la campaña y la posibilidad de que su marido se convierta en el primer gobernador negro del estado de Florida.