En cuanto al antisemitismo, es una tendencia común que no se inventó aquí en Polonia. Está prohibido por la ley y no se sigue oficialmente. Las personas que reconocen sus orígenes judíos reciben el mismo trato que cualquiera de los otros grupos minoritarios mencionados anteriormente y tienen exactamente los mismos derechos. Además, el Gobierno polaco intenta mejorar las relaciones con los judíos. Desde que se restablecieron los contactos diplomáticos con Israel en 1987, se está haciendo un gran esfuerzo para que los jóvenes israelíes que visitan el país en los aniversarios del Holocausto conozcan mejor Polonia. Los jóvenes vienen a participar en seminarios y tratan de descubrir sus raíces.

Cuarto estereotipo: Los polacos abusan del alkohol

Sin duda, la cultura de beber alcohol está muy desarrollada en Polonia. Sus raíces se remontan a los tiempos de la monarquía y la nobleza, que en el siglo XVII tenían incluso el lema «comer, beber y aflojar el cinturón». Esta forma de pasar el tiempo sigue siendo muy popular en Polonia. Sin embargo, no suponga que verá las calles polacas llenas de gente con sobrepeso o borracha. Los polacos suelen ir a bares y pubs: son los lugares más frecuentes para reunirse con los amigos. Tradicionalmente, la bebida alcohólica más popular era el vodka, pero hoy en día más gente, especialmente las generaciones más jóvenes, elige la cerveza – y la cerveza es ahora realmente buena en Polonia.

Quinto estereotipo: El crimen organizado y el robo de coches forman parte de la vida cotidiana

Se dice que Polonia es un país extremadamente peligroso, lo cual es una dura exageración. Pero lo cierto es que hoy en día te pueden robar o matar en cualquier lugar al que vayas, independientemente de la latitud o el estatus político del país que visites (incluso en la plaza de San Pedro de Roma). La delincuencia y el terrorismo se han convertido en una de las mayores amenazas mundiales y todo el mundo debería ser consciente de ello.

Sin embargo, he aquí algunos consejos que debería tener en cuenta mientras viaja. Dado que los delitos relacionados con los coches, como los robos y los hurtos, son bastante comunes, te aconsejamos que dejes tu coche en los aparcamientos especiales y vigilados – las ciudades polacas están repletas de ellos y, sorprendentemente, no son terriblemente caros (aproximadamente 3-5 PLN por hora, dependiendo del lugar, por supuesto). No dejes ningún objeto de valor dentro del coche, especialmente en los asientos delanteros o traseros, o en cualquier lugar en el que sean visibles: esto atrae la atención de los ladrones. En caso de que te ocurra un robo de coche, denuncia siempre a la policía. No es probable que puedas recuperar tu propiedad, pero te darán la confirmación adecuada que necesitas para reclamar el seguro en tu país.