Actualmente no hay instrumentos breves y autoadministrados para medir el grado en que un adulto con inteligencia normal tiene los rasgos asociados con el espectro autista. En este trabajo, informamos sobre un nuevo instrumento para evaluar esto: el Cociente del Espectro Autista (AQ). Los individuos puntúan en el rango 0-50. Se evaluaron cuatro grupos de sujetos: Grupo 1: 58 adultos con síndrome de Asperger (AS) o autismo de alto funcionamiento (HFA); Grupo 2: 174 controles seleccionados al azar. Grupo 3: 840 estudiantes de la Universidad de Cambridge; y Grupo 4: 16 ganadores de la Olimpiada Matemática del Reino Unido. Los adultos con AS/HFA tenían una puntuación media de AQ de 35,8 (SD = 6,5), significativamente mayor que los controles del Grupo 2 (M = 16,4, SD = 6,3). El 80% de los adultos con AS/HFA puntuaron 32+, frente al 2% de los controles. Entre los controles, los hombres puntuaron ligera pero significativamente más alto que las mujeres. Ninguna mujer obtuvo una puntuación extremadamente alta (puntuación AQ 34+) mientras que el 4% de los hombres lo hicieron. El doble de hombres (40%) que de mujeres (21%) obtuvieron niveles intermedios (puntuación AQ 20+). Entre el grupo de AS/HFA, las puntuaciones de hombres y mujeres no diferían significativamente. Los estudiantes de la Universidad de Cambridge no se diferenciaron del grupo de control seleccionado al azar, pero los científicos (incluidos los matemáticos) obtuvieron puntuaciones significativamente más altas que los estudiantes de humanidades y ciencias sociales, confirmando un estudio anterior de que las condiciones autistas están asociadas a las habilidades científicas. Dentro de las ciencias, los matemáticos obtuvieron la puntuación más alta. Esto se repitió en el Grupo 4, ya que los ganadores de la Olimpiada de Matemáticas obtuvieron una puntuación significativamente más alta que los estudiantes masculinos de humanidades de Cambridge. El 6% de la muestra de estudiantes obtuvo una puntuación de 32+ en el AQ. En la entrevista, 11 de estos cumplían tres o más criterios del DSM-IV para el AS/HFA, y todos estaban estudiando ciencias/matemáticas, y 7 de los 11 cumplían el umbral en estos criterios. La fiabilidad del AQ fue buena. El AQ es, por tanto, un instrumento valioso para cuantificar rápidamente dónde se sitúa cualquier individuo en el continuo del autismo a la normalidad. Su potencial para el cribado de las condiciones del espectro autista en adultos de inteligencia normal aún no se ha explorado completamente.