Educación del paciente
Definición
La educación del paciente implica ayudar a los pacientes a estar mejor informados sobre su condición, los procedimientos médicos y las opciones que tienen con respecto al tratamiento. Las enfermeras suelen tener la oportunidad de educar a los pacientes durante las conversaciones junto a la cama o proporcionándoles panfletos o folletos preparados. La educación de los pacientes es importante para que puedan cuidarse mejor a sí mismos y tomar decisiones informadas con respecto a la atención médica.
Descripción
Los pacientes adquieren información sobre su enfermedad de diversas maneras: hablando de su enfermedad con los profesionales de la salud; leyendo material escrito o viendo películas disponibles en los hospitales o en las consultas de los médicos; a través de organizaciones específicas de atención sanitaria, como la Asociación Americana del Cáncer; y a través de anuncios de medicamentos en la televisión y en revistas populares. Con la explosión de información en la World Wide Web, los pacientes pueden acceder a una amplia gama de información médica, desde revistas médicas profesionales hasta grupos de apoyo y chat en línea centrados en la salud.
Puntos de vista
Estar informado sobre las opciones de atención sanitaria es esencial para la salud y el bienestar del paciente. Especialmente con el aumento de la atención gestionada, en la que a veces prima la economía y la eficiencia, los pacientes pueden obtener una mejor atención sanitaria si están informados y son firmes en sus necesidades y deseos. Los pacientes informados pueden beneficiarse, por ejemplo, al darse cuenta de que pueden elegir entre diferentes medicamentos, diferentes tratamientos o qué patrones de estilo de vida pueden afectar a su condición.
Implicaciones profesionales
Los profesionales de la salud han asumido tradicionalmente la responsabilidad de la educación de los pacientes. Sin embargo, en los últimos años, los pacientes tienen un fácil acceso a una amplia gama de información sanitaria de forma independiente. Sin embargo, muchos pacientes no pueden obtener fácilmente la información, especialmente si no tienen una buena formación o no dominan el inglés. Además, es posible que muchos pacientes no entiendan lo suficiente sobre su enfermedad como para hacer las preguntas pertinentes. Por último, una parte importante de la información popular es inexacta o se publica con fines de lucro y no con fines educativos. Los pacientes pueden no ser capaces de distinguir lo que es cierto o lo que es relevante para su propia condición.
Otro aspecto relativamente reciente de la educación del paciente se centra en las ramificaciones legales. Cuando un paciente está plenamente informado de los riesgos y beneficios de un determinado procedimiento o enfoque terapéutico, la probabilidad de que se produzca una demanda por una complicación se reduce considerablemente. El paciente debe conocer los riesgos antes de aceptar el tratamiento.
Las enfermeras desempeñan un papel importante en la educación sanitaria. A menudo son las mejores fuentes de información sobre el cuidado de los pacientes, como aprender a amamantar, calmar a los bebés inquietos o mantenerse cómodos en el hospital. Pueden ser más accesibles que los médicos, tanto porque pueden pasar más tiempo con los pacientes, como porque los pacientes pueden sentirse menos intimidados por las enfermeras y más cómodos haciendo preguntas y compartiendo sus miedos. Es importante que las enfermeras no proporcionen información de la que no están seguras, ni tranquilicen falsamente a los pacientes sobre su estado.