Con el clima caluroso que se pronostica para muchas partes del país, hemos vuelto a los archivos de nuestro blog para traerles algunos consejos sobre el clima caluroso de años anteriores.

– La leche materna es todo lo que su bebé necesita durante el clima caluroso del verano, incluso en días muy calurosos y húmedos. Teresa Pitman, coautora del libro The Womanly Art of Breastfeeding (El arte femenino de la lactancia materna) de la Liga de la Leche, comparte esta información: «La composición de su leche materna cambiará en respuesta a la necesidad de su bebé: un mayor contenido de agua en el clima cálido y un mayor contenido de grasa en los meses más fríos».

– Un bebé pequeño necesita mucha leche materna y se alimentará con frecuencia. Dar al bebé un líquido que no sea su leche significa que el bebé se llenará de una fuente de nutrición inferior. Recuerda que tu cuerpo produce leche en función de la oferta y la demanda. Es importante que se alimente con frecuencia y que no reciba suplementos, incluida el agua, para que usted tenga un suministro de leche abundante. Asegúrate de ofrecerle el pecho con frecuencia cuando haga calor para que tu bebé tenga muchas oportunidades de saciar su sed. Algunos bebés prefieren las tomas cortas y frecuentes cuando hace calor.

– La leche materna es perfecta para los viajes de verano a la playa, el parque, la casa de campo o el camping. Siempre está disponible, no requiere preparación, no se estropea e incluso viene en envases muy bonitos y fáciles de usar. Una de las muchas comodidades de la lactancia materna es lo fácil que resulta salir de viaje con el bebé, ya sea en una excursión de un día o en unas vacaciones más largas. El bebé no necesita más que una muda, unos pañales y la leche de su madre, así que no dudes en disfrutar de los meses de verano sabiendo que tu bebé no sólo está bien hidratado, sino que además está recibiendo la mejor nutrición posible: tu leche materna. Acuérdate de llevar agua para ti, ya que necesitarás más de lo habitual cuando haga mucho calor.

– Amamantar a un bebé caliente en un día caluroso puede hacer que ambos paséis calor y sudéis. Una manta de franela o un paño de cocina colocado sobre su brazo entre su piel y la del bebé puede ayudar a que ambos se sientan más cómodos.

– A los bebés mayores y a los niños pequeños les pueden gustar los polos. Pruebe a hacerlos en casa con zumo diluido, fruta triturada, yogur y mezcla de frutas, o incluso un batido verde (como un batido normal, pero con un poco de hojas verdes también). Los niños pequeños parecen disfrutar jugando con cubitos de hielo en un bol y se los llevan a la boca de forma natural. La fruta congelada en un bol es divertida para jugar y nutritiva: los arándanos, las mitades de uva y los trozos de plátano son los favoritos. Los bebés/niños en fase de dentición los encuentran reconfortantes en cualquier momento del año. A medida que los niños crecen, un plátano congelado en un palo o brochetas de fruta son un bocado rápido y fácil para el verano.

Si tiene alguna pregunta sobre el manejo de la lactancia materna, póngase en contacto con una Líder de la Liga de la Leche. Para encontrar una Líder o un Grupo cerca de ti haz clic AQUÍ