[Capacidad de crianza de las madres con esquizofrenia]
Estudios recientes indican que las tasas de embarazo de las madres con esquizofrenia no difieren significativamente de las de la población general. La enfermedad mental grave de las madres, combinada con el escaso apoyo social y la comorbilidad, puede afectar significativamente a su capacidad de crianza. Sin embargo, la mala calidad de la crianza de las madres psicóticas no debe darse por sentada, de antemano. Algunas de ellas pueden llegar a ser excelentes padres mientras que otras pueden abusar de sus hijos y finalmente perder la custodia por ello. La capacidad de crianza está significativamente influenciada por la visión existente de la enfermedad del paciente-padre. La evaluación de la capacidad de crianza comprende la medición del insight y del riesgo de maltrato infantil. Los factores asociados a un mayor riesgo de maltrato infantil son (a) sintomatología psiquiátrica activa, (b) historia de comportamiento violento en el pasado, (c) historia materna de abuso durante la infancia, (d) ambiente doméstico peligroso, (e) eventos estresantes y poco apoyo social a la madre y (f) expectativas parentales poco realistas. Estos factores deben evaluarse tanto clínicamente como utilizando las herramientas psicométricas adecuadas. Los instrumentos que se han utilizado ampliamente con este fin son (a) «Schedule for Assessment of Insight-SAI», (b) «Childhood Trauma Interview», (c) «Home Observation for the Measurement of the Environment Inventory-HOME» y «Home Screening Questionnaire -HSQ», (d) «Parental Stress Inventory-PSI», «Swedish Parenthood Stress Questionnaire-SPSQ», «Arizona Social Support Inventory» (e) «Parent Opinion Questionnaire-POQ». Las intervenciones para garantizar una capacidad de crianza más adecuada deben centrarse en la planificación familiar: las madres con enfermedades mentales graves tienen escasos conocimientos sobre cuestiones de reproducción y anticoncepción. La mayoría de sus embarazos no son planificados. Es importante que la planificación familiar se adapte a las necesidades específicas de las madres esquizofrénicas y tenga en cuenta las siguientes cuestiones (a) la gravedad y la duración/cronicidad de la enfermedad, (b) el inicio de la enfermedad en relación con el periodo gestacional, (c) la educación de las madres con esquizofrenia teniendo en cuenta su doble papel de paciente/madre. Un programa educativo debería capacitar a la madre para reconocer los signos tempranos de la enfermedad, cumplir con la medicación, aumentar su empatía hacia el bebé y reducir cualquier percepción distorsionada sobre él. Los programas e intervenciones de tratamiento, evaluación, educación y prevención de los servicios de salud mental deben ser continuos y de apoyo.