Un callback, en este sentido, es un método para realizar llamadas internacionales de bajo coste a través de un tercer país, normalmente Estados Unidos, donde las tarifas de las llamadas son considerablemente más bajas. Una variación de esta tecnología fue desarrollada por IDT Corporation en 1991. IDT Corp utilizó una solución de hardware que nunca fue ampliamente aceptada y que finalmente fracasó y fue superada por una solución de software desarrollada simultáneamente por Jorge Blanco en MCI Telecommunications para el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y su personal Wolfgang Scholtes y Kumar Navaratnum.

Para utilizar un servicio de devolución de llamada, a un abonado se le asigna un número único en, por ejemplo, EE.UU., que debe marcarse primero para activar una llamada de retorno. Esto se conoce (en Estados Unidos) como número de marcación directa entrante (DID), o en el Reino Unido como número de marcación directa (DDI). Si se dispone de un identificador de llamadas, es posible utilizar el mismo número DID para muchos abonados diferentes, ya que el sistema de devolución de llamadas podrá reconocer el número registrado de cada uno de ellos.

Al oír un tono de llamada, el abonado simplemente cuelga y espera la devolución de la llamada. Al recibirla, normalmente en unos segundos, el cliente descuelga el teléfono y marca el número deseado. Esto puede significar marcar en formato norteamericano, ya que la mayoría de los servicios de devolución de llamada están basados en EE.UU. y las personas que llaman lo hacen desde ese país. Por ejemplo, un número en Manhattan se marcaría con el código de línea, el código de área y el número de abonado, de la siguiente manera:

1 212 xxx xxxx

Una llamada a Londres, en el Reino Unido, requeriría el código de acceso internacional y el código de llamada del país, de la siguiente manera:

011 44 20 xxxx xxxx

En el plan de numeración norteamericano, se utiliza el 011 como código de acceso internacional, pero en la mayoría de los países se utiliza el 00, de acuerdo con la recomendación E.164 de la Unión Internacional de Telecomunicaciones.

El coste de hacer una llamada telefónica a través de la devolución de llamada consta de dos partes, ya que la persona que llama está pagando efectivamente por una llamada saliente y otra entrante al mismo tiempo. Por ejemplo, si un cliente de España llama a un número de teléfono de Australia, y cuesta 8 céntimos por minuto llamar a España desde EE.UU. (la devolución de llamada, que es una llamada entrante) y 20 céntimos por minuto llamar a Australia desde EE.UU. (la llamada de destino, que es una llamada saliente), entonces la persona que llama pagará un total de 28 céntimos por minuto. Esto puede seguir siendo menos caro que llamar directamente desde España a Australia, que es la razón principal por la que se utilizan las devoluciones de llamada.