Tienes una talla 6, ¿por qué demonios te has comprado una 5? Nos encanta sacrificar nuestros pies por los zapatos que queremos, pero a veces nos pasamos. Así que, cuando «calzarlos» es demasiado doloroso, aquí tienes un atajo para evitar el pellizco.

Ponte un par de calcetines muy gruesos (o varios pares) y aprieta los pies dentro de los zapatos. A continuación, coge un secador de pelo y dale un chorro de aire caliente a las zonas más estrechas mientras flexionas y estiras los pies. Déjate los zapatos puestos mientras se enfrían y luego comprueba los resultados con tus calcetines o medias normales. Puedes repetir este proceso varias veces hasta que consigas un buen ajuste. Pero tenga en cuenta que un exceso de calor reseca el cuero, así que dé a sus zapatos un tratamiento calmante de crema o betún para zapatos después.

También recuerde que el agua hará que el cuero se vuelva quebradizo, así que los zapatos mojados deben secarse con cuidado, sin colocarlos frente al fuego o encima de un radiador. Puedes acelerar el secado y ayudar a que los zapatos y botas mojados mantengan su forma rellenándolos con papel de periódico.

– Este es un extracto de ¡Miéndelo! de Sian Berry, del Partido Verde

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Recuerda en mayo

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