ABC News informa de que cinco estadounidenses contrajeron una inusual enfermedad tras viajar a Alemania para someterse a un controvertido tratamiento con inyecciones de células de oveja, según informaron el miércoles las autoridades sanitarias.

El tratamiento no está permitido en Estados Unidos. Los cinco residentes de Nueva York recibieron la «terapia de células vivas» en mayo del año pasado. Alrededor de una semana después, desarrollaron fiebre, fatiga y otros síntomas de una peligrosa enfermedad bacteriana llamada fiebre Q.

Dos dijeron a los investigadores que formaban parte de un grupo que, durante los últimos cinco años, había viajado a Alemania dos veces al año para recibir las inyecciones. Dijeron que las recibían para mejorar su salud y vitalidad. No hay pruebas clínicas publicadas de que los tratamientos funcionen, dicen las autoridades sanitarias.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades publicaron el miércoles un informe sobre el brote, que incluía un caso canadiense -otro turista médico que recibió el tratamiento en Alemania más o menos al mismo tiempo. Las edades de las cuatro mujeres y los dos hombres oscilaban entre los 59 y los 83 años.

Tres de los seis se recuperaron. Pero otros tres seguían presentando síntomas más de nueve meses después, según las autoridades sanitarias.

La terapia celular viva o fresca consiste en inyectar a las personas células fetales de oveja. A veces se ofrece como terapia antienvejecimiento, pero también se ha promocionado como tratamiento para afecciones que van desde la impotencia hasta las migrañas y las enfermedades hepáticas.